Un operativo comando atacó a tiros la camioneta en la que viajaba el ex presidente de Bolivia, Evo Morales, que salió ileso de milagros y solo fue herido su chofer que puso seguir manejando.
Según fuentes cercanas al ex mandatario, los atacantes huyeron de la escena en helicóptero que despegó desde el aeropuerto de Chimoré y se trataría de seis hombres con armas largas de grueso calibre, encapuchados que vestían de negro.
Evo Morales contó en una radio local, cuatro de los seis individuos salieron de los dos vehículos que los emboscaron y rociaron la camioneta a tiros. La pericia con la que actuaron los atacantes les dio indicios a Morales que se trataban de profesionales, a pesar de no haber acertado con el magnicidio.
El ex presidente acusó al presidente de la Nación, Luis Arce del ataque en otra escalada de la interna que recrudece al punto que el mandatario nacional cambió por segunda vez en cuatro meses a las autoridades del Alto Mando Militar en medio de bloqueos de rutas que llevan adelante los sectores más radicalizados del MAS que responden a Evo.
El ex presidente publicó en su cuenta de X: "Denuncio de manera urgente ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos @CIDH, ante la Secretaria Ejecutiva de la @CIDH @TaniaReneaum, ante José Luis Caballero Ochoa @JoseLCaballero , Relator para Bolivia (CIDH), que agentes de élite del Estado Boliviano atentaron contra mi vida el día de hoy, mientras el Gobierno reactiva operaciones conjuntas entre fuerzas policiales, militares y paramilitares para dirigir la represión y atentar contra la vida de hermanas y hermanos en los puntos de bloqueo y protesta social. Pido que se active el Artículo 41 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos por el riesgo al derecho a la vida y que se haga una visita de trabajo con carácter de urgencia a nuestro páis."